Ciclos inician, mientra otros encuentran su fin... La constante: Dios.
Y es que su perfección y su fidelidad se muestran cada día, en todo momento, miro al cielo y veo en su inmensidad el reflejo del todopoderoso, la obra de sus manos.
Ayer mientras entablaba una conversación acerca del momento en el que mi vida comenzó, me di cuenta de algo, y es que ya lo había analizado, pero no había notado hasta que punto se había hecho tan indispensable.
Puedo responder con toda seguridad que mi vida inició hace 5 años, suena algo ilógico, quizá raro, pero muchos podrán saber a que me refiero... Mi vida comenzó cuando lo conocí, comenzó con Él, y en Él.
Y murió, murió todo un pasado, murió una persona, y delante de aquel ser, se derrumbo un mundo que apenas subsistía, sin sueños, sin anhelos, sin propósitos, colapso toda una vida en caos, era un final que ya había sido anunciado...
Tantas veces la muerte acarició aquel rostro, susurraba frecuentemente a su oído, y en tres ocaciones calló en aquella seducción, que de alguna forma anunciaban el fin de algo, no de esa manera, quizá era una metáfora de lo que estaba por suceder...
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